¿Cómo crear un huerto orgánico en la terraza? Crea tu huerto urbano y disfruta de sus beneficios

¿Alguna vez se te ha pasado por la cabeza la idea de cultivar un huerto ecológico en la terraza? Después de leer este artículo, apostamos a que se convertirá en un gran partidario del movimiento “cultive su propia comida”. Los días cálidos y soleados están aquí. Buenos días está aquí. Razón de más para plantar tomates, lechugas, calabacines y hierbas esenciales. Crecen en todas partes y más rápido de lo que piensas. Conocéis nuestro amor por el tema, ¡pero prometemos intentar ser objetivos!

¿Cómo montar un huerto ecológico en la terraza?

En primer lugar, debe definir una ubicación. Lo ideal es elegir un lugar donde brille el sol, allí las verduras siempre crecen bien. En suelos cálidos, el enraizamiento de las plantas y la aparición de semillas son más rápidos. Es una locura cuánto puedes crecer en 1 o 2 metros cuadrados. Una pequeña cama de verduras es suficiente en un balcón. Con cuatro huertos (de 120 a 140 cm cada uno), ya tendrás suficiente para cuidar en el jardín.

¿Qué hacer antes de poner un jardín en la terraza?

Para preparar la tierra de tu huerto ecológico en la terraza, lo bueno es que te deshaces de la tarea de escarbar en el huerto, basta con el huerto elevado, sobre mesa, sobre palets o en bolsa, porque puedes crear Hermosos jardines en el balcón o terraza. En el jardín, nos centramos en las nuevas tendencias: ¡el montículo forestal! Componemos una pila de madera en descomposición, agregamos tierra, tendemos una red y plantamos, ¡resultados garantizados! Al igual que con el jardín de lasaña, donde plantas tus semillas encima de una capa superpuesta de desechos de plantas, paja, agujas de pino y compost.

¿Soluciones para crear un huerto orgánico en la terraza?

¿Abonamos la huerta orgánica en la terraza?

En buena tierra, todo crece. Olvídate del abono básico en favor del compostaje o del reciclaje de residuos por capas.

¿Cómo elijo mis cultivos de hortalizas?

¿No sabes qué verduras elegir? Preferiblemente variedades regionales que se adapten bien al suelo y clima local. En centros de jardinería, apuesta también por la gama ecológica.

¿Las visitas obligadas? Plantar frijoles, rábanos y espinacas es una apuesta segura. Para el resto, compre plantas de ensalada, tomate y calabacín listas para trasplantar. ¡Suficiente para hacer una hermosa maceta gourmet!

No dudes en probar a cultivar hortalizas perennes en tu propio huerto ecológico en la terraza, como puerros, cebollas, espinacas, etc… Son un auténtico regalo para los jardineros gourmet. Prueba la patata, es muy fácil conseguir las patatas adecuadas. Finalmente, deléitese con las fresas que caen en cascada en una canasta colgante o las frambuesas en el piso: ¡les encanta la fruta de verano!

Todo lo que necesita saber sobre la instalación del sistema

Para optimizar el espacio, preste atención a las distancias entre plantas. Se recomienda plantar tres veces más cerca que las distancias de plantación indicadas en la etiqueta o recomendadas en las guías. Esto le garantiza una cosecha de verduras jóvenes y tiernas con una rotación rápida.

¿Cómo combinar bien tus plantas?

Las combinaciones de tomate y albahaca, ensalada de rábano y zanahoria y ajo funcionan. Crecen uno al lado del otro sin competir nunca y protegiéndose de las enfermedades. Evite replantar una verdura de hoja ancha, un tubérculo o una fruta en el mismo lugar para que no se quede sin tierra.

¿Puedes plantar flores en tu jardín?

¿Por qué privarse de la belleza de las flores? Son fáciles de cultivar y algunas pueden ser deliciosas en ensaladas. La capuchina elimina los pulgones de las verduras, la borraja, una planta medicinal con hermosas flores, atrae a los polinizadores, repele los caracoles y, utilizada como abono verde, nutre el suelo. Para hacerlo lindo, agregue este tipo de plantas a los bordes de su jardín. También puedes decorar con caléndulas de colores, dalias o claveles (que limpian la tierra de gusanos parásitos).

Nuestros consejos para cuidar tu jardín en casa

Use copos de lino o cáñamo que se venden en bolsas. Son ligeros y se despliegan rápidamente en capas de 5 cm. Te servirán para limitar el paso de las malas hierbas, reducir el riego a la mitad y desanimar a los caracoles si creces sobre ellas. Al final de la temporada, simplemente gire el suelo, así como así.

Ojo con el agua, hay que regar con moderación para evitar sorpresas desagradables. El mejor momento para regar es temprano en la mañana o en la noche para limitar la evaporación. Con la ducha podrás controlar mejor tu consumo. Las plantas jóvenes y las plántulas no pueden tolerar la falta de agua. Los tomates y los calabacines requieren mucha agua. Riégalos sin mojar el follaje, incluso si eso significa empujar una botella debajo de tus pies, de lo contrario se formará un moho incurable.

Recetas naturales para cuidar y potenciar tus cultivos

Un buen puñado de ortiga, rica en hierro y oligoelementos, en el fondo del hoyo de plantación del tomate, favorece su crecimiento.

Una pulverización de estiércol, rico en sílice, fortalece los tejidos vegetales, protege contra el oídio y el oídio.

Una decocción de ajo (100 g de dientes picados en 1 litro de agua) en riego evita el marchitamiento de las plántulas y la pudrición de la planta de fresa.


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